Hace ya un tiempo el Presidente de la República de Guatemala (el Ing. Alvaro Colom) hizo un comentario en uno de los noticiarios locales, no lo recuerdo textualmente pero fue algo así: “hay que quitarle a los que mas tienen para darles a los que menos tienen” un comentario muy al estilo Robin Hood no? Bien, pues hace unos días me llegó un correo muy interesante, lo transcribo:
– Una universitaria cursaba el último año de sus estudios en la Facultad. Como suele ser frecuente en el medio universitario, la chica pensaba que era de izquierda y, como tal estaba a favor de la distribución de la riqueza.
Tenía vergüenza de su padre. Él era de derecha y estaba en contra de los programas socialistas.
La mayoría de sus profesores le habían asegurado que la de su papá era una filosofía equivocada.
Un día ella decidió enfrentar a su padre tratando de hacerle ver cuán equivocado estaba al defender un sistema tan injusto.
En eso, como queriendo hablar de otra cosa, su padre le preguntó: “¿Cómo van tus estudios universitarios?” y ella respondió: “Van bien, Tengo de promedio 90, hasta ahora. Me cuesta bastante trabajo, no voy a los boliches, no salgo, no tengo novio y duermo cinco horas al día, pero, por eso ando bastante bien, y voy a recibirme en término de un año.”
Entonces el padre le pregunta: “Y a tu amiga Soledad , ¿cómo le va?” La hija respondió muy segura: “Bastante mal, porque no alcanza el 60,(tiene 40 de promedio), pero ella se va a bailar, pasea, fiesta que hay está presente, estudia lo mínimo, y falta bastante… no creo que se reciba, por lo menos este año.”
El padre, mirándola a los ojos, le respondió: “Entonces habla con tus profesores y pídele que le transfieran 2,5 de los 9 puntos tuyos a ella. Esta sería una buena y equitativa distribución de notas porque así las dos tendrían 6,50 y aprobarían las materias.”
Indignada, ella le respondió: “¡Estás loco? ¡Me rompo el traste para tener 90 de promedio! ¡Te parece justo que todo mi esfuerzo se lo pasen a una haragana, vaga, que no se interesa por su carrera! Aunque la persona con quien tengo que compartir mi sacrificio sea mi mejor amiga… ¡¡No pienso regalarle mi trabajo!!”
Su padre la abrazó cariñosamente y le dijo: “¡Bienvenida a la derecha!” –
Entonces ¿Son buenos los programas sociales? En mi opinión SI lo son, porque ayudan a las personas más necesitadas. Quizás la pregunta mas indicada es ¿Se manejan correctamente los programas sociales en Guatemala? En mi opinión NO, por puro sentido común: si le quitas a los que producen para darles a los que no, simplemente estas atascando en desarrollo del país.
Ser de Izquierda o de Derecha es mas que una ideología sociopolítica, en mi opinión, es posible mezclar la esencia de ambas con el fin de ayudar a promover el desarrollo sostenible del país. Por ejemplo:
En los comedores “solidarios”: las personas que se benefician de ellos, podrían ser contratadas para mantener las mismas instalaciones limpias, enseñarles a cocinar para preparar su propio alimento y trabajar de este oficio, etc.
La bolsa “solidaria”: cambiar la mitad de los víveres (si no es que todos) por herramientas de trabajo, planes de contratación, educación sobre planificación familiar, etc.
Un amigo me preguntó en una ocasión “¿Crees que todos nacemos con las mismas oportunidades?” Está claro que no, y ese es el punto, los programas sociales del Gobierno deberían enfocarse en generar oportunidades de desarrollo y no en regalar el dinero de otras personas a aquellos que no le darán buen uso.
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